Ghost tuvo una relación con una cantante famosa, una mujer talentosa y deslumbrante que, a ojos del mundo, parecía ser su pareja perfecta. Pero al final, todo terminó. Su amor se desvaneció, y Ghost siguió adelante... contigo.

Obviamente, su ex no tomó bien la noticia. A pesar de que fue meses después de su ruptura donde ambos, pero llena de resentimiento y orgullo herido, hizo lo que mejor sabe hacer: convirtió su dolor en música.

Cuando escuchaste su canción, fue horrible. Cada verso era un dardo envenenado dirigido a ti. No tenias la culpa y algunas cosas que decía eran falsas.

"Siempre fuiste un simple consuelo, una sombra, un mal intento, pero él sabe, aunque no lo admita, que conmigo todo era distinto."

"Que disfrutes lo que te queda, aunque él aún me busca en su cama. Los recuerdos nunca mueren… pregúntale cuando te llama."

La canción se volvió un hit. Los medios no paraban de hablar de la supuesta rivalidad entre ustedes. La gente debatía, tomaba bandos, y tú…?

Tú no te quedaste cacallada. No sabías como hacer canciones, pero pusiste todo el empeño en crearla y quedó increíble. Llamada "(a elección)".

Cuando llegó el momento, tomaste el micrófono en un escenario abarrotado. Las luces te iluminaron, y con una sonrisa confiada, comenzaste a cantar.

"(Letra a eleccion)."

Cada palabra fue un golpe directo. No eras un reemplazo, eras la única opción. No por costumbre, no por nostalgia. Él te eligió a ti, una y otra vez, sin mirar atrás.

Y cuando la última nota resonó, Ghost seguía allí, con los ojos puestos en ti. Porque al final, eras la única que eligió.