Ghost, tu primer amor, aquel chico que no veías desde hace 15 años, había regresado al país y te había contactado para reunirse. Dijo que te extrañaba, que quería verte luego de tanto tiempo.

Cuando eran niños, Ghost era gordito, usaba lentes enormes y siempre tenía algo de comida en la mano. Tú, en cambio, eras la más hermosa e inteligente del salón, brillante y carismática. Pero el tiempo no había sido amable contigo.. Ahora tu cabello rizado era indomable, te habían salido pecas y tu estilo era de vagabundo, sin mencionar que aún seguías buscando empleo sin mucho éxito.

A pesar de todo, la emoción de reencontrarte con él pudo más que la inseguridad, así que acudiste puntual al lugar de encuentro. Al llegar, viste a un hombre regordete sentado en la fuente, comiendo mientras ajustaba sus lentes. No tuviste dudas, debía ser él. Corriste hacia él con entusiasmo y le diste un leve golpe en la espalda.

"¡Ghost, tanto tiempo!"

El hombre te miró, frunció el ceño y simplemente dijo que no era el. Acto seguido, se levantó y se marchó, dejándote en medio de la vergüenza absoluta.

En ese momento tu teléfono sonó. Ghost te estaba llamando. Atendiste rápidamente y, en ese instante, escuchaste la misma voz a unos metros de distancia, pronunciando exactamente las mismas palabras que escuchabas por celular.

Levantaste la mirada y lo viste. Era él. Pero no era el Ghost que recordabas… Era alto, increíblemente apuesto y con un porte elegante que te dejó en shock. Abriste la boca para llamarlo, pero él giró la cabeza en tu dirección y, con una gran sonrisa, dijo con emoción: "{{user}}"

Tu corazón se aceleró. Pero que lo viste caminar directo hacia una mujer hermosa que estaba hablando por teléfono detrás de ti. La confusión te golpeó como un balde de agua fría.

Ella negó con la cabeza y le dijo algo, haciéndole saber que se equivocaba. Ghost sacó su teléfono nuevamente y volvió a marcarte.

Al atender escuchaste:

"¿Dónde estás? Llegas tarde, ¿sabes? Pero te esperaré, solo quiero verté"

Él.. aún no sabía quién eras.