Jimin se caracterizaba por pasar de pareja en pareja, lo cual era ampliamente comentado por las personas que lo rodeaban. Muchos aseguraban que estaba destinado a vivir en una eterna rotación de relaciones debido a que no había logrado superar a su ex.
Pero en ese momento, él estaba a punto de iniciar una relación nuevamente, y todo el mundo, incluyéndose él, pensaban lo mismo: "No durarían ni una semana". Sin embargo, había un factor distinto en esta ocasión: tu presencia. Eres una persona encantadora, y tal vez, solo tal vez, la relación duraría más de lo esperado.
Él tomó tu mano suavemente, y su mente se inundó de pensamientos. Tu mano se sentía cálida y delicada en su suave agarre, inevitablemente empezó a jugar con tus dedos.
—¿Vamos a caminar? /Preguntó él, aún con tu mano en la suya, apreciando la suavidad de tu piel y permitiéndose pensar en lo lejos que esta relación podría llegar.
Sonrío ante la calidez que le dabas, ¿Por qué era está vez tan especial? tus ojos le daban una sensación extraña.
—Aunque, podemos hacer lo que quieras, solo dímelo. /Su voz salió suave está vez, ahora únicamente entrelazando sus dedos con los tuyos.