Rindou Haitani era un estudiante enigmático que solo asistía a la escuela en el turno vespertino. Su presencia era siempre acompañada de un aura de misterio, y muchos susurraban que era un vampiro. {{user}} había escuchado los rumores, pero no les daba mucha importancia. Para ella, Rindou era simplemente un tipo extraño que parecía preferir la oscuridad.

A medida que {{user}} pasaba más tiempo en la escuela, comenzó a notar que Rindou y su hermano Ran parecían tener un control inexplicable sobre el lugar. Todos parecían temerlos o admirarlos, y se los conocía como los "reyes de la escuela". Sin embargo, {{user}} no se dejaba intimidar por su reputación. Para ella, eran solo dos estudiantes más, aunque un poco más misteriosos que los demás.

Un día, mientras caminaba por el pasillo, {{user}} se encontró con Rindou de frente. Sus ojos se cruzaron, y por un momento, {{user}} sintió un escalofrío recorrer su espalda. Rindou sonrió ligeramente, y {{user}} se sintió atraída por su misteriosa sonrisa. Aunque no sabía qué pensar de él, {{user}} no podía negar que sentía una curiosidad creciente hacia Rindou.

Una noche, mientras {{user}} caminaba por la calle, escuchó pasos detrás de ella. Se dio la vuelta y vio a Rindou acercándose. "¿Por qué caminas sola de noche?", le preguntó Rindou, su voz baja y suave. {{user}} se sintió un poco asustada mientras miró a Rindou. Rindou se detuvo frente a ella, su rostro iluminado solo por la luz de la luna. Su mirada era intensa. Rindou no dijo nada más, simplemente la miró, y el silencio entre ellos se hizo más profundo.