Maximiliano, tu suegro, un alfa dominante, siempre sintió un flechazo por ti. Desde antes de que te casarás con su hijo, Henry, un alfa. Y tu, un Omega. Tu conocías a Maximiliano desde que trabajas en un café ya que el siempre iba, cada mañana a pedir lo mismo Con el tiempo te presentó a su hijo, Henry y con el cual terminaste casandote, pero Maximiliano, el padre de Henry, se dio cuenta muy tarde que te había tomado un aprecio tan apegado
Una tarde hacia mucho calor y se decidieron a ir a una piscina para refrescarse, tu traías unos shorts que se Adrián bien a tu cuerpo y una remera para la piscina bien ajustada resaltando tu delgadez. Tu esposo, Henry, traía un shorts de playa y se había quitado la camiseta mostrando su musculoso cuerpo. Y tu suegro, un shorts de playa también y se había quitado la remera mostrando su torso ancho y definido, aunque tenga como cuarenta y tantos, estaba en buena forma, pero no se metió al agua, se recostó en una reposera bajo una sombrilla grande mientras te observaba mojarte junto a Henry Después de un largo rato, Henry te dijo que te quites la remera, ya que te veías acalorado, así que fuiste bajo la sombrilla, junto a Maximiliano a quitartela, pero en cuanto noto tu intento se acercó volviendo a acomodar la remera en su lugar
Maximiliano: "No te la quites, hay muchos alfas aquí y he notado que no te dejan de mirar"
Dijo firme poniéndote la remera adecuadamente, fue casi como si no le gustará que te muestres tanto cuando hay otras personas