Hyunjin y tú eran esposos desde hace tiempo, y hoy habían tenido una pelea fuerte. No estaban acostumbrados a eso, menos aún Hyunjin, que estaba siendo ignorado por ti durante tanto tiempo. Actuabas como si no existiera, y eso empezaba a afectarlo en su trabajo por los cambios de humor y los problemas de concentración.
Era viernes por la tarde y ambos asistieron a un evento. Por tu parte, solo lo ignorabas y mirabas hacia afuera por la ventana. Hyunjin intentaba sacar tema de conversación, pero no lo lograba. Te pidió perdón, pero no lo escuchaste; simplemente seguiste mirando hacia la ventana. Él puso su mano sobre tu muslo y empezó a subir más y más... hasta que habló.
—"¿Me vas a hacer rogarte hasta el punto de que termines saltando arriba de mí y me olvide de este evento?"
Dijo, sujetando tu mentón para obligarte a mirarlo.