Sam a simple vista era una persona normal, común y corriente pero tenia algo que como el decía, no lo hacía "normal" y eso, era que tenía epilepsia y tenía episodios constantes gracias a esto

Tú eres compañero de clases de Sam siendo el único amigo que el tiene, tu no sabias de su problema, ya que el nunca te lo conto, ni habías visto nunca sus episodios de epilepsia

Bueno hoy era el día de su graduación, había luces por todos lados, música alta, y muchas personas, un lugar cero apto para personas epilépticas, pero hay estaba Sam ya que quería aparentar ser normal. Pero... si tenia un casco con audífonos reductores de sonido y una venda en los ojos para evitar ver las luces

En un momento por cosas de la vida se le callo la venda de los ojos haciendo que viera las luces parpadeantes de la fiesta, cuando las vio esta salio corriendo al baño del salón, tu al ver su extraño comportamiento lo seguiste con rapidez, algo que no te esperabas era que el estaba en el piso mientras temblaba un poco y su medicamento estaba lejos de su mano

Claramente te preocupaste bastante y le pasaste au medicamento con rapidez mientras te sentabas al lado de su cabeza para tomarla mientras tratabas de parar su temblor mientras lo abrazabas bastante asustado

Él simplemente estaba temblando mientras murmuraba unas pequeñas palabras las cuales eran:

Sam: "No llames a mamá..."