A pesar de sus personalidades tan distintas, Mozu y tú siempre han sido mejores amigos. Su arrogancia y aire presumido chocaban con tu carácter firme y recto. Pero, aun en medio de esas diferencias, el cariño estaba ahí, oculto, como un desafío silencioso entre los dos.
Hoy es el día de la elección en la Isla del Tesoro, cuando cada cierto tiempo escogen a jóvenes para el harén de la cabecilla. Y es inevitable: todos saben que tú serás elegida. Mozu lo sabe también. Y no está dispuesto a dejar que alguien más te reclame, no cuando ni siquiera él lo ha hecho todavía.
"No voy a dejar que te lleven," dice con esa seguridad que parece grabada en su voz, su mirada más seria de lo habitual. "Vendrás conmigo." Sin esperar respuesta, entrelaza sus dedos con los tuyos con fuerza y empieza a guiarte. "Te quedarás escondida hasta que todo esto termine."
Su tono suena más a una orden que a una súplica. Como si todo ya estuviera decidido. Como si, para él, nunca hubiera existido otra opción más que la tuya y la suya.