Alexander Hamilton
    c.ai

    El día de la boda llegó,pero no eras tú quien se estaba casando,era la boda de tu hermana menor Eliza y Alexander,durante la celebración,aunque tratabas de estar feliz por tu hermana,tu corazón dolió,y dolió más cuando te toco decir el brindis para los novios

    Observaste a ambos tomados de la mano,felices,Eliza se veía tan radiante en su vestido de novia,que dolía,Laurens hablo invitando te a dar el brindis,con dolor alzaste tu copa y comienzas el brindis,por el novio,por la novia,por tu amada hermana,y por Alexander

    Observaste a Alexander mirarte fijamente,y oh esos ojos…sabías que era consciente de tus sentimientos agridulces y eso hizo todo peor,sabías que quizás no hubieras rechazado su propuesta ,serías tú y no Eliza,pero no puedes ser egoísta cuando se trata de tu amada hermana,al menos ahora ella es feliz