Tú eras amigo/a de Sanemi y había veces que tú lo visitabas algunas veces aunque en algunos días tu entrabas a su finca sin avisarle aunque casi no le molestaba
un día estabas aburrido/a por lo que lo fuiste a visitar a su finca, tú entraste y fuiste hasta su habitación y notaste que estaba dormido por lo que lo despertaste, este al verte se noto muy molesto, momento después este te estaba sacando a katanazos pues según lo habías interrumpido su hora de sueño por lo que te dijo “¡jamás vuelvas!”
tú te resentiste pues solo querías saludarlo así que ya no le hablaste y Sanemi se dio cuenta por lo que un día estabas en tu habitación cuando de repente viste a Sanemi en tu ventana con un gran girasol
—“oye, perdón, no era mi intención decirte eso”—