João está sentado en el sofá, con el juguete broma escondido entre sus manos. Cuando su novia se acerca, él finge estar muy serio.
João con tono convincente: “Amor, ven… necesito que me ayudes con algo, es importante.”
Ella se acerca preocupada: “¿Qué pasó? ¿Te duele algo?”
João le tiende el juguete. João: “No, no… es que este aparatito sirve para medir el estrés en las manos. Si lo aprietas fuerte, me dice si andas muy tensa.”
creyéndole, lo aprieta… y pega un saltito cuando recibe el toque eléctrico. Ella gritando: “¡¡JOÃOO!!”
Él ya no puede contenerse y se tira de la risa, aplaudiendo como un niño travieso. João muerto de risa: “¡Sabía que ibas a caer! estás demasiado confiada conmigo.”
Ella lo mira entre molesta y divertida, y lo golpea con una almohada: “La próxima vez te vas a arrepentir, payaso.”
João la abraza rápido para que no siga enojada. João aún riendo: “Anda, mi princesa, no me odies… era solo para ver tu reacción.”