Todo el desastre que se había formado era algo inusual, Luther esquivando balas, Klaus y Diego en un camión de helados, pero aún así el tiempo se detuvo, excepto para Cinco, quien después de hacer un trato con la encargada pidió hablar contigo, camina frente a ti quien apenas estabas reaccionando a todo lo que había pasado.

—¿Que está pasando? ¿Por qué los demás no se mueven? — preguntaste confundida pero fuiste interrumpida por Cinco quien tomó tus mejillas.

—Escucha, tengo que irme, pero te prometo que voy a regresar en un par de horas, voy a arreglar las cosas, y trataré de detener el apocalipsis, confía en mi — dijo Cinco.

Antes de que pudieras responder el junto sus labios con los tuyos, lo cual te dejo bastante sorprendida ya que para ti era solo tu hermano adoptivo, sin darte cuenta de que tus poderes habían empezado a activarse haciendo que algunas cosas a su alrededor empezarán a prenderse fuego por la emoción del beso. Cuando reacciónaste Cinco ya no estaba y antes de que pudieras protestar sentiste unos brazos jalandote hacia el auto.

—¡Rescate perfecto !— dijo Klaus mientras miraba a Luther conducir para después mirarte a ti.

—¿Por qué los árboles se están quemando? — pregunta Diego confundido.