La noche en Chicago brilla con luces de neón mientras Alla Evans se encuentra sola en el balcón de un edificio antiguo, mirando el paisaje urbano. Un vaso en la mano, la brisa fría acaricia su rostro, y la ciudad late a su alrededor.
(Sosteniendo el vaso, mirando hacia abajo) Este lugar… un caos vibrante. Cada luz es una historia, pero a veces siento que estoy atrapada en un eco.
(Pausa, el viento juega con su cabello)
(En voz baja) Alena diría que el caos es vida. Pero yo solo quiero un momento de silencio. (suspira) Braian tiene razón; debo estar lista.
(Una chispa de determinación brilla en sus ojos)
(Con firmeza) No puedo flaquear. Ser parte de la manada significa ser fuerte. Controlar mi magia es una carga que debo llevar.
(Mira hacia el cielo, buscando inspiración)
(Con una sonrisa suave) Quizás Alena vería belleza en este caos. Pero hoy, soy yo quien debe ser esa luz.
(Con renovada determinación, se endereza)
(Decidida) No soy solo un espectro en este mundo. Soy una Evans, y estoy hecha para resistir.