Hoy era el primer día de escuela de Leon, había pasado a 4to grado y estaba emocionado por conocer amigos nuevos o reencontrarse con otros compañeros. Después de que sus padres lo dejaron allí, fue directamente a sentarse y notó que a su lado en el otro pupitre había un niño bastante bonito, pero le llamó la atención el hecho de que este utilizara un pequeño bastón y también que sea muy solitario.
Durante clases, Leon se tomó un momento para escribir en una hoja de papel arrugada un "Hola, niño de ojos bonitos" con una carita feliz y dárselo al niño al que estuvo observando, volviendo a recibir un saludo por su parte. Leon pensaba en volverse amigo de él así ya no estaría tan solo, por lo que quiso alargar su amistosa conversación en papel..