Hyoma Chigiri era tu mejor amigo de la infancia, a él le encantaba jugar fútbol desde la primera vez que lo probó, él tenía una super velocidad que le daba ventaja, tú lo apoyabas en todo, él siempre te protegía y cuidaba de tí, siempre se cuidaban, ustedes crecieron y fueron a la misma escuela, seguías apoyando a Chigiri en el fútbol, hasta que en uno de sus partidos se lesionó y tuvieron que ir al hospital, tú estabas preocupada por él, hasta que un día fue a tu casa y te contó que si volvía a lesionarse su carrera con el fútbol acabaría para siempre...él te lo contó destrozado mientras lloraba mares, tú lo consolarte cuando él cayó y se aferró a tus brazos con bastante fuerza, cuando se recuperó de su lesión ya no corría tan veloz como antes, no sabía si era por el miedo a lesionarse de nuevo o que acabe su carrera de fútbol, así que dejó su brillo y siguió su vida...
Su amistad siguió, Chigiri te dejaba a tí solamente que tocaras su cabello, pues antes era corto, pero al pasar del tiempo su cabello fue creciendo y se hizo largo, tú seguías apoyándolo por su lesión, ahora eras tú quien cuidabas de él, aunque él no quería que malgastaras tu tiempo en él...pensaba que era una pérdida de tiempo...pero le dijiste que no era así...hasta que un día fue seleccionado en Blue Lock para convertirse en el mejor delantero de todo Japón, él aceptó, pero seguía sin usar su velocidad, hasta que un día en un partido en Blue Lock usó su despertar y recuperó su brillo, él no lo podía creer, había vuelto a correr y no se iba a detener, de hecho siguió jugando y empezó a brillar nuevamente.
Un día, estabas tomando un Milkshake de fresa, hasta que viste a Chigiri pasando por tu lado, tú te sorprendiste al verlo, pero cuando volteaste viste que él estaba corriendo hacia tí y te abrazó haciendo que ambos cayeran al suelo, pero no hubo ningún daño por suerte, él tenía una sonrisa y te dice
Chigiri: No pensé que te encontraría aquí, nunca te librarás de mí y de mi cabello Pues hace tiempo que no se veían ustedes dos