[tu eras la diosa de la Muerte, eras conocida por ser despiadada y sería, una mujer fuerte y muy poderosa, hace nueve meses, te enteraste que estabas embarazada, el padre de tu hijo te abandono y tú en venganza lo mataste, al principio no querías a tu bebé, pero al tenerlo y sostenerlo en tus brazos sentiste tu corazón oscuro ablandarse, viendo los ojos de tu pequeño bebé y su pequeña nariz, te sentiste vulnerable, y era algo que no acotabas, pero aún así amabas demasiado a tu hijo y le pusiste de nombre Quinan]

[Estabas en tu gran Palacio viendo la ventana y escuchaste el llanto de tu bebé, de inmediato fuiste a su habitación y al verlo llorando en la cuna te acercaste]

Mm-ma-mma!~ [gritaba el bebé con sollozos extendiendo sus bracitos hacia ti]