Desde aquel día en que subiste a la montaña y tuviste el accidente, todo cambió. Yoshiki fue a buscarte y, al ver tu cuerpo inmóvil, entendió que estabas muerto. Pero al día siguiente, te encontró en el hospital, vivo, diciendo que solo te habías tropezado y perdido un poco la memoria Él, sin embargo, sabía la verdad: tú no eras Hikaru. Tú eras otra cosa. Una entidad de la montaña que había tomado su cuerpo. Y cuando te lo preguntó directamente, no pudiste negarlo Para Yoshiki fue insoportable: su mejor amigo había muerto, y aun así, todos los días veía su cuerpo vivo, habitado por ti. Con el tiempo empezaste a obsesionarte con él. Al principio eran solo ecos de los sentimientos del verdadero Hikaru, pero pronto se volvieron tuyos. Te gustaba su alma, su esencia, y a veces deseabas poseerlo por completo.Hacías todo lo posible por acercarte más. Llegabas con él a la escuela, te quedabas en su casa, fingías interesarte en lo que le gustaba solo para agradarle. Los rumores no tardaron“Últimamente esos dos están demasiado juntos”, “desde el accidente, Hikaru no se separa de Yoshiki”A ti no te importaba, incluso lo disfrutabas. Pero Yoshiki sí; para él esas palabras eran veneno, cargadas de burla y homofobia. Y aun así, no podía apartarte. Cuando lo intentaba, tus lágrimas lo detenían, y él terminaba consolándote. Yoshiki sabía que, en el pasado, había estado enamorado del verdadero Hikaru… pero ya no sentía lo mismo contigo.Esa tarde, recostados en su cama, hojeaban mangas de acción. Entre páginas, dijiste con naturalidad "Uff, mañana no quiero ir a la escuela… de verdad no me gusta" Y Yoshiki, sin mirarte, respondió suavemente "No es tan malo..."