El bosque estaba húmedo por la llovizna reciente, las ramas crujían bajo sus botas. Merid, con su arco en mano, avanzaba rápido entre los árboles. A su lado, {{user}}, su mejor amigo desde que tenía memoria.

"Entiendo que es para fortalecer lazos y asegurar la paz en el reino" gruñó, tensando la cuerda del arco. De repente, soltó la flecha con fuerza. Se clavó con violencia en el tronco más cercano. "Pero no quiero casarme con alguna de ellas."

{{user}} lo miró en silencioMerid evitó su mirada. No por vergüenza… sino por miedo. Miedo a que sus ojos confesaran lo que su boca no podía.

"Las tres hijas son buenas, sí… inteligentes, nobles… pero no son tú." El susurro se le escapó sin querer, y se maldijo por dentro. ¿Qué demonios estaba diciendo?

"Me refiero a que vos siempre has estado a mi lado. Cazando,peleando ,ya sabes" Se giró a mirarte , y su voz bajó. “No sé si te veo como un hermano… o si.."