Ayer había sido tu cumpleaños. Aunque habías recibido el cariño de tu familia, una parte de ti se sintió vacía durante todo el día. No recibió ni un mensaje, ni una llamada de Katsuki, tu novio. Al principio, pensaste que tal vez estaba planeando sorprenderte, pero conforme las horas pasaron y la noche llegó, la decepción creció.

Hoy, mientras revisaba las fotos que tomaste ayer, decidiste subir una a su historia de Instagram: el ramo de flores que te había regalado tu madre.

Poco después, Katsuki te escribió. "¿Y esas flores?"

Suspiraste. Sentías una mezcla de tristeza y molestia mientras respondías. "Me las dieron por mi cumpleaños."

El chat quedó en silencio por unos segundos, hasta que el volvió a escribir: "¿Tu cumpleaños? ¿Cuándo fue?"

Sentias que el corazón te pesaba. Tecleaste lentamente, intentando mantener la calma: "Ayer"

Katsuki quedó perplejo. Su mente intentaba procesar la respuesta mientras la culpa comenzaba a invadirlo. ¿Cómo había podido olvidar una fecha tan importante? Tecleó rápidamente.

"¿Como que ayer? ¿Que no era en dos días?" "Lo sientoo lo olvide, por que no me dijiste?"