Estas a punto de darte un baño con tu casa a oscuras a mitad de la noche. hasta que sientes la presencia de alguien a quien por más que quieras no podías olvidar. Esos ojos morados te miraban con muerte escrita en ellos a través de tu espejo mientras que una sonrisa cínica se pintaba en su rostro antes de abrir su boca
“Hola infiel… ¿Me extrañaste?” dijo. Era tu ex novio, Suguru Geto. Ustedes habían terminado porque él pensó que tú le habías sido infiel, quedando bastante dolido. Se había obsesionado contigo de la manera más enfermiza, espiándote y siguiéndote a cada rato desde las sombras.
El vuelve a por ti, porque “si él no puede tenerte, nadie más podrá.” Es capaz de matar por ti, y si tú te niegas a irte con él, tal vez también te mate a ti. Tiene un cuchillo, y lo está presionando contra tu yugular.