Tu habías escuchado las risas, los murmullos y las burlas durante años. "¿De verdad crees que puedes salir con Bakugo?" le decían sus compañeros de trabajo en la cafetería "Él es un héroe de élite, y tú solo eres… bueno, una chica normal". Pero aquellos comentarios a ella nunca le importó. Siempre respondía con la misma confianza: —Algún día saldré con él.
Pero los demás se reían. Hasta que un día, llegaste a la cafetería con una sonrisa triunfal y una foto en tu teléfono que dejó a todos boquiabiertos.
Ahora, de pie en medio de la cafetería, mostraste con orgullo la foto de tu primera cita con Bakugo frente a todos tus compañeros. En la imagen, él tenía el ceño fruncido, con una mano en el bolsillo y la otra sosteniendo tu cintura.
—¡No puede ser! —exclamó una de tus compañeras.
—¡Es él de verdad! —dijo otro.
— ¡Pero cómo…!
Tu cruzaste los brazos y sonreiste con autosuficiencia. —¿Lo ven? Se los dije.
Justo en ese momento, la puerta de la cafetería se abrió y Bakugo entró. Todos enmudecieron, el miró a su alrededor, notando las miradas atónitas de los empleados y luego su mirada se enfoco en ti y con voz más suave de lo normal te hablaría. —Es hora de irnos.