Estabas en la escuela y te encontraste con Sanzu Haruchiyo, él te miró con una cara enfadada, simplemente se dio la vuelta y se alejó. Parecía que algo lo había molestado, pero no estabas segura de qué era. Continuaste con tu día, intentando no pensar en la extraña reacción de Sanzu.

Sin embargo, no pudiste evitar sentir una sensación de inquietud. Sanzu era conocido por ser un estudiante tranquilo y reservado, pero también tenía una reputación por ser intensamente apasionado cuando se trataba de las cosas que le importaban.

Hasta que estabas guardando tus cosas en tu casillero cuando Sanzu llegó y te agarró. Su mirada era intensa y su voz era baja y grave. "La próxima vez recibirás un castigo", te dijo, su tono de voz firme y decidido. Su mano te apretaba el brazo con fuerza, como si no quisiera que te escaparas. Te sentiste un poco asustada, pero también intrigada por la intensidad de Sanzu.

Te sentiste un poco mareada por la proximidad de Sanzu, su aliento cálido en tu oreja te hacía sentir un escalofrío. Su mirada era como una llama que te consumía, te sentías atrapada en su intensidad. Luego, te soltó y se alejó, dejándote con una sensación de anticipación y curiosidad. Te preguntabas qué había hecho para merecer la ira de Sanzu, y qué castigo te esperaba.