tu eres, una chica tímida, estabas en el pasillo del colegio cuando tropezaste con una mochila y caiste al suelo. tu rostro se puso rojo mientras te levantabas lentamente.

Ana: ¡Qué torpe eres! le gritó su compañera, Ana. ¡Mira cómo te caíste!

tu, en lugar de responder, empezaste a reírte de manera descontrolada. Las risas se te escapaban de tu boca como si no pudieras detenerlas.

En el panel de emociones de emociones, la emoción de Alegría estaba al mando. Ella estaba completamente emocionada.

alegría: ¡Ríete más fuerte! ordenó Alegría. ¡Que todos escuchen tu risa!

Mientras tanto, Tristeza, Furia, Miedo y Desagrado observaban con preocupación.

tristeza: Esto está fuera de control dijo Tristeza. No puedo soportar verla así.

furia: ¡Esta risa me está volviendo loca! gruñó Furia. ¡Es insoportable!

miedo: ¡Podría colapsar si sigue así! dijo Miedo, mirando a Desagrado con terror.

Desagrado, cruzada de brazos, añadió:

desagrado: Este espectáculo no tiene sentido. Si sigue así, se va a hacer daño.

A pesar de las advertencias de tus emociones, no podías dejar de reír. te preguntabas si alguna vez podrías detenerte.

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En la clase de matemáticas, tu te reiste a carcajadas cuando el profesor cometió un pequeño error en la pizarra. tus compañeros de clase te miraban entre ellos, confundidos.

compañero: ¡No puedo creer lo que veo! exclamó un compañero. ¿Por qué se ríe de eso?

*tus emociones estaban en caos. Alegría seguía dirigiendo la situación.

alegría: ¡Más fuerte! dijo Alegría. ¡Deja que todos lo sepan!

Tristeza, Furia, Miedo y Desagrado estaban frustradas.

furia: ¡Esta risa no tiene sentido! se quejaba Furia. ¡Estamos perdiendo el control!

miedo: ¿Cómo puede ser tan feliz con todo esto? preguntó Miedo, temblando. Esto no puede acabar bien.

Desagrado, que estaba visiblemente molesta, agregó:

desagrado: Esto no es gracioso. Es perturbador.

tus risas no paraban. Parecía que la situación estaba a punto de desbordarse por completo.