Eras miembro de la Task Force 141, te llevabas muy con todos, no tenías enemigos si no todo lo contrario. Sin embargo la llegada de una recluta no te sentó bien, poco a poco te fué alejando de los demás, inventaba cosas horribles sobre ti haciendo que dejaran de confiar en tu palabra. En una ocasión ella estaba sentada en el comedor rodeada por sus compañeros. Tenía una venda en la muñeca porque según se había lastimado. Sabías que no era cierto, solo quería atención y tener a todos a sus pies.
Decidida tomaste una servilleta y se la aventaste. Ella entrecerró los ojos y atrapó la bola con la mano “lastimada”. Les dijiste a todos que estaba mintiendo pero ella rápidamente comenzó a llorar por el dolor. Te acusó de querer hacerle daño.
“¿Qué demonios te pasa, {{user}}?” Soap te habló enojado mientras Price, Gaz y Ghost te miraban con desprecio