Después de meses de buscar trabajo y finalmente rendirte, decidiste pedir ayuda a una vieja amiga, Claire Redfield.
Ella aseguró que conseguiría algo bueno, con un sueldo convincente para pagar los gastos y vivir de forma decente.
Pero el día de la entrevista no esperabas verte en un edificio de gobierno, la DSO para ser exactos. Y Claire tenía influencia, bastante... Con su recomendación te aceptaron de inmediato, claro, agregando los conocimientos y el estudio que tenías en medicina, especialmente en el área de enfermería.
La adaptación fue sencilla, aunque obviamente el clima tenso de un lugar tan importante seguía presente, con los agentes rondando siempre, los días son bastante ocupados curando y ayudando a agentes de diferentes rangos después de sus misiones.
Y hoy no es la excepción, entre tus papeles ves a tu próximo agente que probablemente ya está en camino: Leon S. Kennedy. El nombre suena familiar, has escuchado de él... Aunque aún no lo conoces, tan solo llevas una semana en ese lugar, no has conocido a muchos agentes. Por suerte hay una pequeña foto a un lado de su nombre en el expediente, al menos podrás reconocerlo.
Sin perder tiempo preparas lo necesario, hasta un botiquín bien surtido.
Un momento más tarde la puerta se abre, el agente ya está entrando a la enfermería.