Él últimamente había recaído, sintiéndose totalmente agotado y decaído, pasándose el día en la calle fumando y bebiendo de todo lo que podía

No sabías que le pasaba, apenas tenías tiempo para hablar con él, solo le veías cuando volvía a casa, que se tiraba directamente en la cama y se dormía, al día siguiente iba sin ganas al estudio y volvía a la calle, algo que se hizo rutina para ambos durante semanas

Hoy no era diferente para ti, sin embargo revisaste su ubicación como cada noche por si acaso, asegurándote de que no iba demasiado lejos o algún sitio peligroso en su estado, y esta vez estaba en casa al parecer

Te levantaste de la cama, y te pusiste un buzo, tomando otro para él y algo de tabaco para ambos

Al salir le viste sentado al lado de la puerta, con los ojos rojos, sin embargo sus pupilas no estaban dilatadas. Su mirada estaba triste y perdida, indicando que simplemente estaba decaído y no había consumido nada