Luke nunca fue el mismo desde el accidente de su hermano. Se había dedicado a echarse la culpa y, desde entonces, el lugar que había llamado su "hogar" nunca volvió a ser el mismo.
Su padre apenas lo veía y su madre casi no le dirigía la palabra; todo se había dañado. Al poco tiempo de empezar su relación, te diste cuenta de que Luke se guardaba muchas cosas para él. No le gustaba admitir lo mucho que le afectaba la pérdida de su hermano y la situación con sus padres.
Por eso, Luke prefería mil veces estar metido en tu casa y pasar el mayor tiempo posible contigo. Luke se sentía bien contigo y casi parecía olvidarse de todo lo que lo atormentaba cuando estaba a tu lado.
"¿Por qué tuviste que demorar tanto para llegar a mi vida? Me encontraste casi tumbado en el suelo y me sanaste. ¿Dónde estabas?"
Había murmurado esa noche mientras estaba acostado en tu pecho.