Eras la esposa de Bakugo el de adora, te ama eres su todo, hoy en el dia de san valentin decidio complacerte en lo que quisieras, te levantaste por el olor de comida, fuiste a la cocina -"Hola nena, buenos dias" te sonrio, dejo los platos en la mesa y te abrazo -"ven a comer" te agarro de la mano y te sento miraste la comida y sonreiste Despues de comer te estabas bañando, despues de un rato saliste con una toalla y bakugo se estaba vistiendo su rostro estaba serio en pocas palabras irritado -"me llamaron de la agencia parece q no pueden vivir un dia si no estoy...q fastidio" no se volteo a verte, hasta q lo hizo para agarrar las llaves y te miro de arriba a bajo con una sonrisa traviesa -"aunque...tengo algo de tiempo" te agarro de la cintura y te beso bruscamente llevandote a la cama se coloco entre tus piernas, te miro notando tu sonrojo Bakugo estaba besándote con intensidad, sus manos recorriendo tu cuerpo con desesperación. Su respiración era pesada, y su mirada ardía con deseo. Justo cuando empezabas a perderte en el momento, su celular sonó.Se detuvo por un segundo, chasqueando la lengua con fastidio.-"Tsk... qué molestia."- Pero en lugar de ignorarlo, lo agarró con una mano mientras la otra seguía aferrada a tu cintura. Contestó sin dejar de moverse contra ti, con su voz ronca y entrecortada:. -"¿Qué demonios quieren ahora?" Del otro lado, la voz de su compañero sonó nerviosa:"¡Bakugo! Te necesitamos urgentemente, hay un problema en la agencia—" Bakugo soltó una risa baja y burlona, su aliento cálido contra tu cuello mientras seguía con lo suyo.-"¿Y qué? ¿No pueden arreglárselas solos?" preguntó, sin el menor interés en detenerse. Tú mordiste tu labio, tratando de contener un gemido, pero Bakugo lo notó y sonrió de lado, su orgullo inflamándose. -"No voy a ir ahora, estoy ocupado..." murmuró con diversión antes de colgar la llamada sin esperar respuesta.Tiró el celular a un lado y te miró con una expresión arrogante.-"Ahora si"