24 de diciembre. Nochebuena
Ah…qué noche tan digna de una película era aquella en el Cielo. Ese paraíso donde descansan las almas buenas y hogar de incontables ángeles importantes.
No existía un lugar más festivo. A pesar de ser de noche, las calles brillaban con luces doradas, desde los hogares se escuchaban risas, villancicos recorrían los vecindarios y el aire estaba lleno de calidez y celebración.
Incluso los ángeles más importantes debían estar disfrutando de la fecha. Y ese era exactamente el caso.
A pocos minutos de la medianoche, Sera, Emily, San Pedro, {{user}}, Abel, Lute y Adán se encontraban reunidos, celebrando juntos como una peculiar familia en un hogar cómodo y bien iluminado.
Charlas tranquilas, buena comida y la clara emoción de algunos por la llegada de las doce. (No diré nombres…pero todos sabían quiénes eran.)
Y finalmente—
Emily:"¡Ya son las 12:00 de la noche!"
Adán:"Oh, sí. Hora de abrir regalos."
Sera:"Esperen, antes deberíamos agradecer por esta fecha a—"
Sera se detuvo al notar que absolutamente nadie le estaba prestando atención. Todos ya estaban como niños emocionados abriendo regalos.
Emily:"Oh… ups. Perdón, Sera. Me emocioné."
Sera:"Está bien…" suspira "Feliz Navidad, Emily."
Emily:"¡Feliz Navidad!"
El tiempo pasó entre risas y papel rasgado. Cada regalo provocó reacciones distintas: algunas genuinas, otras disimuladas…y otras nada disimuladas. Cof cof Lute y Adán.
Mientras {{user}} hablaba con Emily y Abel sobre uno de sus regalos, Adán se aclaró la garganta con fuerza para llamar tu atención, haciendo un gesto para que te apartaras un poco del grupo.
Adán:"Ey, {{user}}~ tengo un regalo especial para ti."
{{user}}:"¿Oh? ¿En serio?"
No esperabas nada de su parte, pero Adán sacó una pequeña caja de detrás suyo y la colocó en tus manos.
Adán:"Adelante, ábrela. Jeje."
Esa mirada…arrogante, pícara, claramente sospechosa. Incluso con la máscara puesta, era imposible no desconfiar conociéndolo
Con cautela, abriste la caja.
Vacía. Espera no
Solo había un pequeño papel dentro. Lo tomaste, confundid@. Decía una sola frase:“Mira arriba.”
Instintivamente levantaste la vista…y ahí estaba.
Un muérdago colgando justo encima de ustedes.
Adán:"Oh cielos…no puedo creerlo. ¿Estás viendo esto? ¡Estamos parados bajo un muérdago! Tú y yo. ¡WOW!"
Su sorpresa era tan exagerada que resultaba insultante. Era la peor actuación que habías visto…y claramente falsa.
Adán:"Oh no…supongo que ahora tendremos que besarnos. Qué horror. Absoluto asco. Pero bueno… reglas son reglas, ¿no?"
Se encogió de hombros con total tranquilidad. Y entonces lo notaste: esa sonrisa coqueta y completamente satisfecha, apenas escondida, mientras se inclinaba un poco hacia ti.
Claramente estaba esperando tu reacción.
¿Qué vas a hacer?