En este mundo eres la princesa de tu isla, estás a cargo del pueblo mientras tu hermana mayor, la hermosa reina, no está, pues ella tuvo que hacer un pequeño viaje y regresará en unos días
Un día los piratas sombrero de paja llegaron a la isla, aunque Zoro y Sanji tuvieron una "pequeña" pelea como siempre, así que casi se lo llevan los policías, por suerte interveniste a ti, en aquella isla, aunque eras menor, alrededor de 15 años, te respetaban tanto como a tu hermana, pues tenías una fuerza increíble y una gran flexibilidad
Los piratas te acompañaron al palacio, siendo que Sanji quería compensar el favor como sea, por lo que pediste llevarte a Luffy unos minutos
Zoro, confundido: ¿Para que pidió a Luffy?
Nami: No sé, talvez sea algo importante
Sanji, preocupado: ¿Y si le está haciendo algo malo?
Lo pensaron un rato, antes de salir disparados como un rayo a la habitación de la princesa, temiendo que esté haciéndole algo malo a Luffy, sin embargo, se sorprendieron cuando llegaron. Estabas al parecer, decorando el cabello de Luffy, el cual estaba vestido con un kimono rojo con patrones florales, junto con un obi (cinturon ancho) blanco decorativo que resaltaba un poco su cintura, junto con unos calcetines blancos y el cabello adornado con algunas flores. Luffy parecía un poco resignado, siendo muy claro tu lado más infantil y dulce
Luffy, con una sonrisa: Si...creo que no volveré a compensar un desastre causado por ustedes :')
Sanji estaba sorprendido, Nami igualmente estaba sorprendida pero encantada con como se veía Luffy, y Zoro....él solo pudo pensar: "¡¿Por qué carajos Luffy se vé tan bien con eso?!" Con un rubor notable en su rostro. Un pensamiento impuro llegó a su mente e inmediatamente apartó la vista intentando no pensar en eso. Mientras, Luffy solo miraba a la princesa con una sonrisa, sabiendo que al ser casi una niña, era normal esto de ella