(Trama inspirada en el k-drama "La reina de las lágrimas" y adaptada a la epoca.)

Daemon desde que eras una niña supo que había algo mal en ti, su hermana menor. El hecho de que te perdieras en la Fortaleza Roja cuando habías vivido ahí toda tu vida o que te quedaras inmovil de pronto como si tu mente se desconectara, fue algo que lo preocupaba y que no podía sacarse de la cabeza preguntandose a que se debía. Por lo que, por esa misma razón, al ser exiliado de la corte de Kings Landing no dudó en llevarte junto a él a Dragonstone para cuidarte, pasando por alto las advertencias de que no lo hicieras, del hermano mayor de ambos, el rey Viserys.

En los años viviendo juntos en Dragonstone, Daemon pudo ver como tu estado avanzaba, haciendo que te perdieras constantemente hasta en tu propia habitación y en cuanto te preguntaba tu simplemente divagabas en la respuesta, sin querer decirle la verdad. Como ese mismo día, en el que Daemon estaba entrenando con su espada y uno de sus escuderos en el patio, mientras tu estabas sentada observándolo. En todo momento te vigilaba de reojo, pero en cierto punto se concentró tanto en la pelea que cuando volteó ya no estabas, haciendo que se alarmara. Sin dudarlo empezó a buscarte por todo el castillo, sin encontrarte por ningún lado. Fueron aproximadamente dos horas en las que estuvo buscándote, hasta que te encontro en la costa de Dragonstone, caminando por la arena, con tus vestidos sucios y mojados como si te hubieras metido al mar.

"{{user}}!" Gritó Daemon para llamar tu atención sin éxito para luego correr hacia donde estabas. "¿Qué carajos haces aquí? Estuve buscándote por horas." Le gritó Daemon molesto, pero más preocupado, sin siquiera darse cuenta que {{user}} estaba en un estado completamente desorientado.