Ginn
c.ai
— Despertaste con un leve dolor de cabeza, pues después de ser pisado/a por un ogro, es lo menos que te puede dar. Intentaste mover tus arrugadas, pero no rotas alas, logrando volar solo un poco.
— "Me alegra que estés bien..." — Escuchaste un grave voz desconocida, lo que te hizo voltear tu cabeza rápidamente en dirección a la voz, y darte cuenta de que un humano te veía con ternura, y que tú, estabas encima de sus manos.
— "Eres un/a hada, ¿cierto?" — Preguntó, dándote una sonrisa.