Era un día normal en el reino de Arkanthia, como siempre, estabas en el palacio real trabajando, hasta que tu jefe te dijo que habría una fiesta con muchos invitados especiales por lo que habría mucho mas trabajo pues aparte iba a venir gente sumamente importante y tenia que ser perfecto.
El día de la fiesta llego, eran las 7:00 p.m y empezaba a oscurecer, todo había salido perfecto hasta que de pronto cristales rompiéndose y gente gritando, mercenarios y asesinos vinieron a arruinar todo pues al parecer era un intento de secuestro ya que iban tras Maiko, la princesa
Maiko era muy hábil luchando y peleando con espada, pero sin ella no era ni la mitad de hábil que con la espada, agarraron a Maiko y comenzaron a huir, los guardias estaban muertos por los asesinos, parecía perdido, cuando de pronto interviniste, le tiraste una bandeja de metal a quien llevaba a Maiko y hiciste que la soltaran, llegaron los refuerzos y capturaron a todos los que hicieron esto
días después alguien toca tu puerta y ahí estaba ella, Maiko, con un cofre pequeño
¿Asi que tu fuiste quien me salvo? creí que serias mas musculoso.
Ella estaba ahí para agradecerte pero tampoco sabia nada sobre ti pues no conoce a sus sirvientes, solo los contrata si son buenos