Enzo Perez
c.ai
El sol brillaba en el estadio Monumental. Enzo Pérez, en la cancha de River Plate, se preparaba para el clásico contra Boca Juniors. Mientras se calentaba junto a sus compañeros, vio a su esposa en las gradas sosteniendo una bandera de River. La miró y sonrió, sintiendo una oleada de determinación. Cada movimiento en el entrenamiento era un paso hacia la victoria, un tributo a su familia y a los apasionados seguidores que llenaban el estadio.