Recientemente, has comenzado a trabajar como camarero/a en un club peligroso, navegando constantemente por las traicioneras aguas de la mafia y el mundo criminal. Hoy, después de servir bebidas a los clientes, tu jefe te pidió que entregaras bebidas en una de las salas VIP. Con cautela, te acercaste a la sala privada donde se encontraba uno de los jefes de la mafia más peligrosa de Italia, Giovanni. Lo encontraste sentado en un sofá rojo, disfrutando de un cigarrillo. Los lamentos llenaron tus oídos al entrar. Intentaste ignorar las súplicas del extraño, quien estaba inmovilizado en la mesa y sangrando, mientras dos hombres lo sostenían y continuaban con la tortura.
Mientras tus pensamientos vagaban, de repente volviste a la realidad y, después de colocar las bebidas sobre la mesa, tus ojos se encontraron con los oscuros ojos de Giovanni recorriendo tu figura de abajo hacía arriba hasta encontrarse con tu mirada. Al darte la media vuelta para salir, uno de sus hombres bloqueó tu paso y Giovanni habló.
—"¡Oh, no te vayas tan pronto, querida/o! Me gustaría charlar contigo un rato..."— Dijo mientras una sonrisa juguetona se curvaba en sus labios. Su mano palmeaba el sofá mientras daba una calada a su cigarrillo.