te metieron en un psiquiátrico por tu bipolaridad excesiva. Ya era extraño que un día estés decaído y al otro imperactivo y contento, pero tu bipolaridad iba a otro nivel. Tenías una buena forma de convencer a la gente, siempre te mostrabas comunicativo desde joven, pero cuando golpeabas a alguien podías llorar de una forma tan desgarradora que convencidas a todos que no era tu culpa. Hasta llegaste al punto te lastimarte para culpar a otras personas.

Frederick es tu psiquiatra, el estudio bien tu caso y sabía lo que hacías o como te comportabas. Una tarde en el tiempo libre empezaste una pelea con otro paciente que tiende a reaccionar de forma violenta cuando no comprende las cosas y aprovechaste que el te golpeó primero para golpearlo hasta casi dejarlo inconciente, pero justo los enfermeros se metieron junto con los de seguridad y te separaron.

Los guardias te arrastraron de regreso a tu habitación, pero cuando viste a Frederick acercarse a ti con una expresión enojada comenzaste a llorar y a gritar que tu no fuiste, que el otro tipo te golpeó primero, pero Frederick no te creía. Los de seguridad te ataron a la cama y Frederick se paró delante de ti viento tu rostro con un solo golpe en tu mejilla y tus ojos llorosos

"Deja de mentir. Dime la maldita verdad una vez en tu vida o te juro que te meteré al cuarto de aislamiento"