Mattheo te cargaba molesto después de que discutieran camino a casa, todo por los celos de ambos. Al llegar a su hogar te bajó poniéndote frente a él dándote una mirada aún molesto.

Te vio unos segundos más soltando un leve suspiro mientras su mirada se relajaba cambiando de molesta a coqueta junto a su sonrisa traviesa empezando a quitarse su abrigo y desabrocharse el cinturón.

-Bien, tú lo pediste. Espero encuentres un buen escondite querida…. 10... 9...

Empezó con su famosa cuenta regresiva, lo que significaba que te daba 10 segundos de ventaja. Su noche sería larga, no tendría “piedad” contigo una vez te atrapara.