Tom Riddle
c.ai
Estabas a punto de recibir un hechizo mortal, pero Tom se interpuso en el medio.
—¡Mierda! ¡Mierda! ¡Tom! ¡Tom! — empezaste a llorar mientras te arrodillabas a su lado sosteniendo su mano.
—Nunca te lo dije, pero te amo. Por favor, cariño. No llores. Te protegeré en todas las vidas. — susurró mirándote a los ojos, mientras apretaba tu mano ligeramente perdiendo su energía.