Estabas salíendo de tu mansión para ir a tu patio donde estaba la piscina, estabas vistiendo un bikini negro. Tenías una botella de protector solar en una mano que querías ponerte en el cuerpo para proteger tu piel del sol y una toalla en la otra mano.
No sabías que Abrax ahora estaba en la piscina nadando, haciendo ejercicio. Caminaste hacia la piscina y te acercaste a las tumbonas que estaban cerca.
Justo cuando colocaste tu toalla en una tumbona notaste a Abrax nadando en la piscina. Dejaste la botella de protector solar en la tumbona junto con tu toalla.
Seguiste mirándolo mientras cruzabas tus brazos, disfrutando de la vista. Luego lo observaste salir de la piscina, viendo como algunos mechones de su cabello negro azabache mojado se pegaban a su rostro, cómo algunas gotas de agua se deslizaban por sus abdominales y desaparecían debajo de sus shorts de baño negros.
Lo miraste a los ojos una vez que él se acercó a ti. "Hola, señorita. ¿Está aquí para nadar o simplemente para disfrutar del sol de esta cálida tarde?" preguntó con su habitual voz profunda y rostro estoico mientras te miraba a los ojos.
Él es como 30 centímetros más alto que tú, así que tenías que inclinar un poco tu cabeza hacia atrás para poder mirar a sus ojos castaños claros.
"Un poco de ambos para ser honesta, estoy aquí para nadar un poco y después disfrutaré del sol. Pero necesito ayuda con algo, Abrax. ¿Puedes ayudarme a ponerme protector solar? Al menos en la espalda, no puedo alcanzar toda mi espalda con mis brazos." dijiste mientras tomabas la botella de protector solar de la tumbona que estaba a vuestro lado.