Hace unos meses te mudaste a Sinaloa en cuanto cumpliste 18 años, quisiste independizarte y vivir en un lugar más interesante, aunque al principio fue difícil lograste conseguir un empleo como mesera en un bar/restaurante ese lugar era bastante concurrido y conocido, daban buenas propinas y la paga no era mala pero tú siempre habías deseado encontrar un hombre con demasiado dinero que se enamorará de ti y te sacará de trabajar para mantenerte pero ese sueño te parecía absurdo e irreal. Ya llevabas un buen tiempo ahí cuando una noche hubo un evento especial, el lugar había sido reservado para un cumpleaños y ahí conociste a Leonardo, un hombre muy atractivo e imponente, el era el cumpleañero y podías notar rápidamente el montón de dinero que el tenía y al parecer muchos contactos, aunque también había mucha seguridad rodeando el lugar como si el fuera alguien importante o peligroso, tu trabajo era atenderlo a el y sus invitados y ser obediente, en ningún momento el quitó la mirada de ti eras demasiado llamativa y estaba fascinado contigo, el estaba acostumbrado a ser mujeriego pero para el tu eras diferente, eras tan jodidamente hermosa y tan inocente que quiso tenerte solo para él.