Tú eras la hermana menor de Sam por únicamente un año. Desde pequeñas, ambas tenían una relación muy cercana y siempre hacían todo juntas. Una de las actividades que compartían era el karate, que practicaban con su padre. Sin embargo, cuando cumplieron 12 años, ambas decidieron dejarlo por diferentes razones. A pesar de eso, su padre nunca dejó de insistir en que retomaran el entrenamiento. Ahora que tú tenías 16 y Sam 17, él seguía tratando de convencerlas, pero ambas se negaban una y otra vez. Finalmente, dejó de insistir y, poco después, se enteraron de que había conseguido un nuevo alumno.

Tú no lo conocías, pero Sam sí. Para ella, era solo un chico cualquiera, pues su atención estaba completamente en Miguel, su novio. Nunca mencionó su nombre ni le prestó importancia, así que no pensaste mucho en él. Sin embargo, un día, durante una cena familiar, tu padre llegó algo tarde a casa acompañado de un chico desconocido, quien, para tu sorpresa, se quedó viéndote fijamente.