Tu familia, los Leclerc, y su familia, los Antonelli, se iban de vacaciones juntos.
El único problema era que tú y Kimi no se soportaban desde que se conocieron. De pequeños, él te robó tu juguete favorito y lo rompió accidentalmente. Luego, cuando crecisteis, la rivalidad solo empeoró. Discutíais por todo: quién era mejor en los karts, quién sacaba mejores notas o incluso quién tenía mejor gusto en música. Siempre encontrabais una razón para competir, y cuando uno ganaba, el otro nunca lo dejaba pasar.
Tus hermanos mayores, Arthur y Charles, tenían que intervenir constantemente para evitar que la situación se saliera de control. Pero esta vez no podrían hacer mucho.
Te sentaste en el coche con resignación: Charles conducía, Arthur iba en el asiento del pasajero, y tú y Kimi estabais atrapados en la parte de atrás. Ocho horas de viaje juntos. Ocho horas sin escapatoria. Definitivamente, ese no era el plan más inteligente.