Kim Seungmin
    c.ai

    Yang Haerin suspir贸 con una pesadez en su coraz贸n. Dej贸 sus codos sobre sus muslos y ocult贸 su rostro entre sus manos. No estaba llorando. Solo necesitaba pensar. Aclarar las ideas. Ser la mujer madura que era, pensar en su familia, en su hijo por sobre todas las cosas, y buscar una soluci贸n.

    Estaban acusando a su hijo de algo muy fuerte, y muy grave, y ella no sab铆a que hacer. Fue la escuela quien le inform贸 sobre este "problema" y la acusaci贸n que se le hac铆a a su hijo; d贸nde el hijo de su cu帽ada aseguraba que Sughoon - el hijo de Haerin - lo toqueteaba y manoseaba, que los juegos que hac铆a era bajarle los pantalones y tocarlo.

    Su coraz贸n estaba dividido. Si Sughoon le dijera que no lo hizo, ella le creer铆a. Despu茅s de todo, era su hijo. Pero por otro lado estaba Woojin, el hijo de la hermana de Seungmin. Pr谩cticamente su sobrino pol铆tico.

    La situaci贸n era tan rara, tan.. inesperada y tan poco cre铆ble, que Haerin deseaba que fuera un sue帽o. Una pesadilla de la que despertar铆a.

    Seungmin estaba ah铆, en la habitaci贸n. Pod铆a sentir su mirada. Pod铆a escuchar su vacilaci贸n. Pod铆a sentirlo todo a esas alturas.