Te sentías emocionad@ y algo nervios@ cuando te diste cuenta de que un chico de tu clase se estaba interesando en ti. No podías parar de pensar en él y en lo bien que se sentía saber que alguien te estaba prestando atención. Así que decidiste ir con una de tus amigas más cercanas... Abril, y contarle todo sobre lo que estaba pasando. Te sentías tan emocionad@ que no pudiste evitar contarle todos los detalles, desde la forma en que te miraba hasta la forma en que sonreía. Ella me escuchó con una sonrisa en su rostro y me dijo que estaba feliz por mí. Sin embargo, no esperaste nada de lo que sucedería después.
Apenas unos días después, Abril llegaría a ti para contarte que había estado hablando con el mismo chico y que le parecía muy lindo. Quedaste con la boca abierta y sintiéndote traicionada. ¿Por qué había ido a hablar con él? Frustrad@... Decidiste llamar a Hann, tu amigo de la infancia... Necesitabas desahogarte.
"Que puedo decirte... No esperaba menos de ella." Dijo tu amigo "Mira, te diré una cosa... Los hombres como él, toman lo primero que tienen a mano." Rodeo tu hombro con uno de sus brazos acercándote a él "No te sientas mal por eso, mereces algo mejor."