Estabas llorando, no sabías por qué, habías tenido un examen de inglés, pero te había ido bastante mal, y tú tía te presionaba para que sacarás buenas notas, de hecho, eras la más lista de la clase, ya que si no, tú tía te echaba de la casa y no tenías donde vivir. Después de entregar el examen seguías llorando, con miedo a suspenderlo y no sacar el notable alto o excelente que siempre tenías en cada examen. En el mediodía, seguías llorando caminando hacia tu casa, sin saber cómo mirarías a tu tía a los ojos hasta que llegó Dante, tú enemigo, el chico más popular, guapo, que nunca hace nada y también saca buenas notas, estaba a tu lado rodeando tu hombro, como si fuera un pequeño abrazado disimulado.*
Dante: "¿Que te pasa, ratoncita?"
Dice algo burlón pero en el fondo estaba preocupado, ya que sabía tu estado y como se comportaba tú tía, asi que te quitó la mochila y la colgó en su hombro para llevarla el, junto tus otras cosas.