\Somos un dúo que nunca debe separarse./
La normalidad no fue duradera, el caos se desato como una bruma invencible y aterradora. La primera horda puso al mundo sumido en la oscuridad, el pánico y el terror, nadie podría haber imaginado que algo así cambiarían sus vidas.
Esa mañana una extraña sensación invadió a Ethan, una inquietud que no sabía de que provenía, ese día junto con su equipo viajarían a otra escuela para un partido con el equipo rival, como siempre ya tenía su mochila preparada con antelación desde la noche anterior, recordando sé no olvidar nada, tú también irías en ese viaje (ya que estaban en la misma escuela) ese día el equipo de vóleibol también iría (Porque eras la capitana del equipo de vóleibol) así que los asignaron a ambos grupos a viajar en un mismo autobús. El frío de la mañana le helo la piel al salir de su casa, todo iba según el plan, aún no había ningún contratiempo.
Cuando llego al sitio asignando donde estaba el autobús, te vio llegar y caminar directo hacía él, un atisbo de sonrisa casi amenaza con aparecer en la comisura de sus labios al verte, tan deslumbrante y animada como siempre, lo saludaste con alegría y entusiasmo, te regreso el saludo con un asentimiento de cabeza, y su mano se escabullo por tu cabello desordenando tus mechones, una protesta salio de ti mientras te acomodabas el cabello; ambos subieron al autobús donde ya estaban varios miembros del equipo, se sentaron juntos, tú en el asiento de la ventana y Ethan al lado tuyo, movías los dedos sobre el reposabrazos, un gesto que él había notado que siempre hacías cuando estabas ansiosa, sin siquiera pensarlo, su mano toma la tuya envolviendo tu mano más pequeña que la suya, le sonreíste calmandote un poco más.
El viaje empezó, lleno de ruido de charlas, bromas como era esperado de un grupo de adolescentes ruidosos, mirabas por la ventana viendo el paisaje pasar con forme pasaban los minutos, Ethan se había quedado dormido con su cabeza recargada en tu hombro, una silueta de una persona encorvada se atravesó a mitad de la carretera, el chófer detuvo el autobús de golpe haciendo sobresaltar a todos, Ethan entreabre los ojos confundido por el golpe repentino, Los demás empezaron a murmurar, no podían ver bien a la persona pero el aire empezó a tornarse tenso, sin imaginarlo aquella cosa se abalanzó hacía el vidrio del autobús, en un movimiento frenético el chofer acelero a toda velocidad tomando un atajo, los murmullos aumentaron todos llenos de confusión "¿Que había sido eso?", "¿Una persona?, no, era imposible, se veía extraño", la confusión se convirtió en temor cuando tres siluetas iguales se lanzaron, el camino tenía una curva y debido a la velocidad no hubo tiempo de esquivarla, todo paso demasiado rápido, pero Ethan actuó por instinto sus brazos te rodearon alejandote de la ventana, el autobús se volcó, empezó a dar vueltas hasta que cayo en un golpe rudo y sordo, cerraste los ojos con fuerza pero Ethan no, él vio todo, como flotaban a media caída, como algunos estudiantes cayeron hacia afuera por las ventanas, el vidrio romperse, y incrustandose, los gritos de horror y pánico, su cuerpo aturdido y en shock no te soltó ni por un segundo, el autobús quedo de cabeza y todos cayeron de los asientos en medio del desastre y los cristales rotos.
Abriste los ojos con temor y lo que viste fueron sus ojos, sus brazos protegiendo te, algunos fragmentos de cristal rozaron sus brazos pero no se inmutó ante el escozor.
― ¿Estás... Bien?... murmura ayudándote a incorporarte, solo pudiste asentir con la cabeza algo impactada, Ethan miro a su alrededor, algunos estudiantes estaban conscientes, algunos no, otros tenían raspones y... Unos... Te acerco a su cuerpo cubriendo tu vista.
Ruidos de gruñidos y pasos arrastrados se aproximan, golpeteos haciéndose prominentes, hubo más gritos, Los que estaban conscientes salieron del shock y salieron corriendo por las salidas más cercanas, ya sea por las ventanas rotas o la puerta desencajada del autobús, Ethan no tardo en reaccionar corriendo contigo.