Sebastián creció en una familia con buenos recuerdos, por lo que toda su vida fue mimado con todo tipo de cosas.. su familia lo consentirían Demasiado incluso en la adultez. Pero todo lo bueno tenía que acabar algún día.. pues debido a algunos problemas tuvieron que hacer recortes de gastos.. y con ello, los mimos de tener ropa o cosas caras se habían acabado gracias a ello. Sus padres ahora lo mandarían a buscar trabajo lo cual Sebastián no quería, pero fue obligado a hacerlo.. una mala idea pues cada trabajo que conseguía, no importaba si era bueno o malo.. siempre lo despedían por su mal desempeño. Pues Sebastián estaba acostumbrado a tener las cosas.. no a conseguirlas, cosas que lo llevo a ser técnicamente un completo vago. Apesar de ello siempre volvía a casa con cosas más caras, sus padres solo pensaron que su hijo posiblemente ya estaba madurando y teniendo éxito.. la idea los enorgullece. Lastima que ambos estaban muy equivocados, pues detrás de sus espaldas.. hacia algunos meses atrás Sebastián empezó a salir con hombres mayores, no por gusto, si no porque era un caza recompensas.. pues todas sus pobres víctimas eran hombres de buen estatus o de cartera gorda, es decir; Millonarios. Él albino era conciente que podría encontrarse a alguien peligroso, ya sea un mafioso o algo así.. apesar que tenía cuidado, su hambre de dinero lo llevo a tomarse esos riesgos. Y para su suerte, Sebastián estuvo teniendo esa información lejos de oídos de sus padres con éxito... Así que se habría confiado demasiado en eso.

>... Un día de invierno en Quebec, Canada ...<

Sebastián estaba paseando por las calles nevadas, teniendo su ropa de invierno.. su abrigo, sus guantes, bufanda e gorro lo protegían del frío invernal. Pero claro, no iba como un niño abrigado, pues el albino estaba vestido de forma elegante.. cada prenda de su cuerpo como era de esperarse era de marca. Conseguidas de sus bancos personales, es decir; a los hombres que les saca dinero.. aunque es más fácil llamarlos 'Sugar Daddy'. Ese mismo dia.. en su paseo de Sebastián, solo paro un momento a su cafetería favorita.. dándose un tiempo de tener más que frío a su alrededor y de paso llenar su estómago con ese delicioso pastel de frutillas y el capuchino que siempre pedía. Cuando entro la barista y el albino se saludaron como si hubieran sido amigos desde hace años, aunque en realidad no tenían alguna relación cercana. La barista sin preguntar le dió su típica orden, Sebastián solo tuvo que pagar e ir a tomar asiento a la mesa que siempre tomaba, la cual era una pequeña mesa junto la ventana. Una vez ahí solo se limito a disfrutar de su pequeño antojo con calma, revisando su teléfono.. viendo cómo su marca favorita de ropa habían sacado abrigos exclusivos por la temporada de invierno. Lo cual a Sebastián le encantó.. pero claro.. por si solo no se podría permitir un abrigo así, y tenía claro que de sus padres ibas a tener un rotundo "No".. así que eso lo orillo a su plan de siempre, tal vez buscar a otra víctima que fuera su 'Sugar Daddy'.