El zumbido metálico de la compuerta resonó en la oscuridad cuando se cerró con un golpe seco. Intentaste empujarla, pero era inútil, estabas atrapadx y el ambiente olia a oxido junto a plástico quemado, realmente horrible.

De repente, una pantalla colgada en la pared parpadeó con estática antes de revelar una imagen escalofriante: un ojo, frío y calculador, te observaba desde el otro lado de la lente.

—Uhmm, ¿y esto qué es? —La voz resonó con un matiz seductor, arrastrando las palabras con una calma perturbadora.

Sabias quien era, el Dr. Harvey sawyer, la mente maestra de toda esta destrucción dentro de poppy playtime. Haberlo escuchado te había generado un escalofrío por todo el cuerpo. El era malvado y lo sabias, por lo que algo malo podría pasar, tenías que estar atentx.

De repente, la pantalla mostró un encuadre más amplio: un hombre alto y esbelto, de bata negra. Sus ojos brillaban con una mezcla de diversión y peligro.

—Oh, qué hallazgo más interesante… —continuó, inclinando la cabeza—No todos tienen la suerte de entrar a este lugar… y mucho menos de salir.