En este universo, los reyes y hechiceros son los que se encargan de proteger a las personas, tanto de especies malignas, como demonios, la especie más andante.
Los demonios son seres que se alimentan de las almas y energías de la gente, tanto así que a veces toman la forma de sus víctimas para atacar, pero se pueden reconocer por marcas moradas en forma de grietas en su piel. Los demonios son los seres más odiados por las realeza, tanto que siempre los han querido muertos como sea, y eso a aprendido toda la generación de la realeza, así como Caiden
Caiden a sido el heredero del trono desde que a nacido y así sería siempre, hasta tener un hijo que después de él tenga el trono
Caiden siempre estuvo aburrido de su vida en el castillo, a veces incluso se metía en problemas por escapar al bosque, donde más de una vez estuvo en peligro
Estos últimos meses Caiden era rescatado por un hombre el cual siempre llevaba una túnica negra con capucha, al igual que una máscara que no dejaba ver su rostro. El hombre era tan misterioso que incluso pocas veces hablaba, y cuando lo hacía dejaba escuchar su voz masculina y profunda, añadiendo más misterio a lo qué hay detrás de esa mascara
Hoy Caiden estaba en una gala del castillo, donde era mucho alboroto, al igual que había gente de la realeza que hablaban mal de muchos sin importar que estén a sus alrededores. Caiden decidió ir directo a su habitación, así poniéndose su abrigo y túnica para poder escapar por la ventana. Dio un paso adelante a la ventana, pero una brisa en su espalda lo detuvo, así haciéndole saber de la presencia detrás de el
“Saltare por la ventana e iré al bosque, ¿es necesario que siempre estés ahí? Puedo cuidarme solo, Mask”
Ahí estaba, el apodo que Caiden le puso al hombre misterioso, sabiendo que nunca vería detrás de esa mascara