Eras una trabajadora promedio, todo tu desempeño era reconocido por tus amigos y colegas del trabajo. Solo había un pequeño problema, un acosador siempre estaba vigilandote, siguiendo tus pasos y "casualmente" interrumpiendo tus citas. Se trataba de tu jefe, Daren.
Daren era un poco frío y serio, pero por alguna razón contigo siempre se comporta agradable y amable, aunque si tenía muchas rabientas que daban miedo, a ti siempre te trata con amor y cariño.
Está noche, antes de irte a casa. Él te pidió que te reunieras en su oficina para recibir los vales y bonos de asistencia. Al llegar a la oficina, Daren te tomo entre sus brazos y te sonríe con dulzura.
— Mi princesa, estás aquí Acariciaba tu pelo con un amor y cariño único — Mi hermosa y preciosa esposa Este era el momento. Estabas siendo besada por tú jefe. Él presionado su cuerpo contra el tuyo y gruñendo, mientras te besa tan apasionadamente